El doctor Francisco Parra, urólogo del hospital Ribera Povisa, nos explica las ventajas de esta prueba diagnóstica en la sospecha de cáncer de próstata.
El cáncer de próstata es el segundo tipo de cáncer más diagnosticado en hombres según los datos de la Asociación Europea de Urología, y el más frecuente en varones adultos de países desarrollados con larga esperanza de vida. Detectarlo a tiempo y aplicar un tratamiento personalizado es la mejor estrategia para mejorar las probabilidades de curación de los pacientes.
«La técnica de la biopsia con fusión de imágenes es una de las herramientas con mayor precisión en el diagnóstico del cáncer de próstata», tal como nos confirma el doctor Francisco Parra, urólogo del hospital Ribera Povisa, que lleva realizado este procedimiento desde 2021 con resultados muy satisfactorios.
¿En qué consiste la biopsia de fusión?
La biopsia prostática con fusión de imágenes consiste en trasladar con exactitud la imagen sospechosa obtenida por la resonancia magnética, realizada previamente a la biopsia, a una imagen ecográfica que se obtiene durante la biopsia en tiempo real. Con un software específico, el especialista ve simultáneamente la imagen de la resonancia sobre la imagen que recibe del ecógrafo con lo que puede situar con precisión las lesiones previamente identificadas como sospechosas y tomar la muestra en ese lugar concreto. Es un trabajo muy coordinado con el servicio de Radiología, que dirige el doctor Francisco Tardáguila, ya que esa resonancia previa es la que nos indica donde tomar las muestras.
¿Cuál es la diferencia respecto a la biopsia habitual?
La biopsia transrectal clásica también se realiza ecográficamente dirigida, pero las muestras de tejido se toman de manera sistemática, ordenadamente. Sin embargo, podría darse el caso de que no se tomase una muestra de la zona sospechosa, sobre todo si es muy pequeña o se encuentra en un lugar de difícil acceso.
El grado de precisión de la biopsia de fusión consigue tomar muestras de tumores muy pequeños o localizado en puntos de acceso más complejo, que en una biopsia tradicional podrían pasar desapercibidos. De esta manera, se puede llegar a hacer un diagnóstico mucho más precoz. Detectar el cáncer de manera más temprana abre la puerta a una selección más adecuada de las opciones terapéuticas, lo que nos permite tener una mayor tasa de éxito en el tratamiento.
¿En qué casos hay que realizar una biopsia de la próstata?
Los especialistas podemos recomendar la realización de una biopsia siempre que hay sospecha de cáncer. Esta sospecha puede venir por un análisis con un antígeno prostático específico, lo que se conocer como PSA, más elevado de lo normal. O bien por detectar alguna anomalía o protuberancia en el examen digital de la próstata.
¿A partir de qué edad es recomendable hacer una revisión de la próstata?
Se aconseja comenzar a realizar una revisión urológica anual a partir de los 50 años. Si hay factores de riesgo o antecedentes de cáncer de próstata en la familia, se debería adelantar esa revisión a los 40.
